martes, 19 de febrero de 2008

Ya me suena a bastante.


Hoy me he levantado con un ligero bulto sobre mis hombros. Hoy me he despertado con un año más de vida. Hoy, con medio kilogramo más a causa del chorizo y la carne, me he dado cuenta que tengo 21 años. No sé si suene como una suerte de autodestrucción cronológica o una especie de achaque maligno de un veinteañero con aires de viejo amargado. Quizás me siento así porque vengo escuchando algunas melancólicas canciones de José Feliciano y uno que otro bolerito cantinero de Iván Cruz.

Me han preguntado cómo la pasé ayer. He respondido cosas como: Bien, tranquilo, conversando, comiendo, etc. Pueden llamarme aburrido o lo que sea, pero celebrar mi cumpleaños, con litros de alcohol y cientos de vasos plásticos, es algo que, por el momento, no me interesa. Lo he hecho. Sí. Años anteriores he celebrado mi cumpleaños con amigos y amigas. Como diría en mi lenguaje coloquial: La pasé de puta madre. No puedo negarlo. Hasta baile reggaeton en cierta ocasión e incluso me dejé tomar más de cuatro fotos en pose de modelo de empresa de transporte andino.

Insisto. No me considero un niño-viejo ni nada que se asemeje a esa situación anímica y emocional. Tengo 21 años e intento comportarme como tal. Aún no tengo ni la edad , ni los medios, para hacer ciertas cosas que quisiera hacer. Simplemente trato de no pensar en mi paso cronológico y seguir viviendo mi día a día como siempre.

Un par de veces me he imaginado de unos 40 años. Espero, para ese lejano tiempo, no haber pasado por el riguroso trámite del examen dactilar urológico para descartar una anomalía en la próstata. No sé si tendré, para ese entonces, una esposa que escuche música electrónica conmigo. No sé si seré el profesional perfecto y casi idolatrado que espero ser. Al contrario. Me suelo imaginar como todo un mamarracho de adulto. Quizás con lentes por haber pasado gran parte de la adolescencia pegado al monitor de la computadora. De repente con un problema de eyaculación precoz a causa de mi virginal temor de ir al urólogo y mostrar, en nombre de la ciencia, mis partes más pudendas. Intuyo que, a esa edad, usaré zapatos y no zapatillas. Mis pantalones no andarán cayéndose y no mostraré mi ropa interior con la usual indecencia que ahora profeso. Incluso he llegado a pensar, con algo de malicia, que me peinaré con raya a la izquierda y hasta me echaré gel fijador para cabello mixto.

Ya me duele pensar que pasarán varios años antes que me vea hecho todo un cuarentón. A veces siento que la vida pasa tan rápido como uno quiere que pase. Y uno se siente anciano o joven cuando quiere. Yo, con mi usual espíritu cuadriculado, me siento un niño en ciertas ocasiones y un futuro viejo (no verde) en otras.

Tengo familiares que bordean los 90 años y tranquilamente podrían protagonizar comerciales de baterías duracell. Bailan y ríen con una facilidad poco creíble. Narran sus experiencias con un interesante tono a leyenda urbana de los años 20. Cuentan con alegría y orgullo las veces que han visto al equipo peruano de fútbol en un mundial. Y se vuelven unos niños arrugaditos cuando se les pregunta sobre los juegos que tenían en ese entonces.

Ya estoy haciendo chistes malos sobre mi edad. Solo creo que el cumplir años es un paso obligado cada doce meses. Es una celebración casi religiosa para los que tienen el espíritu juerguero y lujurioso. No sé como pasaré mi próximo onomástico. Debo pensar que con calor y con el polo casi pegado a mi espalda. Tomando muchas cosas heladas y comiendo casi hasta pecar de gula.

No considero que mi cumpleaños sea tan importante como para festejar con fuegos artificiales a la media noche y mucho menos que un año mas en mi calendario sea digno de una borrachera inolvidable. Un año más siempre será muchas experiencias más, siempre quedará en la memoria. Siempre se tendrán cosas nuevas que contar. Siempre se tendrán personas nuevas que saludar. Y es que ahora, con 21 años y un día, ya me suena a bastante. Y mañana mi bastante será más.
Este es un video que, con muy buena intención y con bastante cariño, me pasó Pamela el día de mi cumpleaños.

5 comentarios:

Anonymous Anónimo ha dicho...

ooola cuando fue tu cumple? no sabia sino t hubiera saludado piii Feliz cumple, besitoos

19 de febrero de 2008, 9:24  
Blogger Cesar Melgar. ha dicho...

[RESPUESTA]:Hola Mafer. Pues mi cumpleaños fue el 17 de febrero. Gracias por tus saludos y por comentar en el blog.

19 de febrero de 2008, 10:05  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Pero es q sí, es la verdad, te estas avejentando cada día más y más y más y más... jajaja una cara de bebe ahh pero con propio estilo y q sin duda me encanta!!! besiiitos. uñuñui :)

23 de febrero de 2008, 20:59  
Blogger Bono ha dicho...

brodeR! feliz cumple! no sabia q era tu cumple! bueno exitos en este año 2008.... hablamos!

24 de febrero de 2008, 23:15  
Anonymous Anónimo ha dicho...

oe compare viendo tu block me entero que tu cumple ya paso, no recuerdo con exactitud la ultima vez que te vi pero, recibe estos saludos que llegan algo tarde. Un abrazo y muchos exitos. jaime (y)

4 de marzo de 2008, 11:12  

Publicar un comentario

Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]

<< Inicio

Contadores Gratis
Contadores Web
Free counter and web stats